domingo, 25 de noviembre de 2012

SORPRESA

Holaaaaaa,
ayer disfruté de unas horas de relax gracias a una mini-escapada que me preparó mi marido. Llevamos unas noches muy malas, una situación que se ha alargado demasiado, y tanto a él como a mi, nos hacía falta unas caricias, unos mimos, como cuando le tocas el lomo a un perro ¿no?

Se presentó en mi trabajo a la hora de salir, fuimos a comer al italiano de al lado que, por cierto, se come muy muy bien, y luego me llevó a un centro de flotación y wellness, que estaba muy cerca de mi trabajo. Primero, sesión de flotario los dos juntos, luego sesión de haloterapia en la cueva de sal, y por último, masaje. ¡Lo necesitábamos! Son de esas cosas que se deberían hacer una vez al mes como poco, pero esos precios..... Suerte que existen los super-descuentos a través de muchas páginas web, porque si no, nothing de nothing.

El flotario no me impactó, porque yo ya había hecho una vez una sesión en otro lugar, y ya sabía de qué iba. La cueva de sal si. Una sala con sal gorda en el suelo, las paredes están forradas de piedras de sal enormes, el techo es de bigas de madera en la que reposa una red que aguanta todo un manto de piedras del tamaño de una nuez. Luz ténue, música relajante, ambiente cálido. Ambiente, que no temperatura, ya que esta sala está a 16 º. Te pones en una tumbona de éstas que si te empujan, el respaldo cede y te quedas totalmente estirado. Piernas en alto, dos mantas...y a respirar! (y a dormir).
Me relajé muchísimo, casi me duermo, perdí la noción del tiempo. Mi estado de relajación se vio un poco afectado cuando la chica entró a buscar a mi marido para hacerle el masaje, pero enseguida volví a mi paz interior. Música de arpa, que me hacía pensar en hadas del bosque, duendecillos verdes, hojas mojadas, cascadas........y de repente, una vibración. Una vibración.....la percibo por mi oído derecho....la pared vibra? Es como una taladradora......, no, no es eso, es como......una centrifugadora.......¿es un centrifugado? Nooooooooooo, ¿es una lavadora? ¿lo es? Tiene que serlo porque empezó con una intensidad que fue a más, y estuvo por lo menos 10 minutos con el mismo ritmo. Sí que lo es, lo reconozco perfectamente, es una MALDITA LAVADORA...........¿Cómo pueden tener la lavadora al lado de esa sala? Por espacio tiene lógica, porque el local a lo mejor no permite que sea de otra manera, pero es un fallo enorme. No se escuchaba bien la música, abrí los ojos, y todo ese estado de relax que había conseguido, desapareció en un instante.
Qué pena.

Luego vino el masaje. Fue corto y rápido, pero estuvo bien. Me encanta que me soben la espalda, y si no lo hago a menudo, aún más.

Estuvo muy bien, debemos repetirlo más.
Os lo aconsejo.











3 comentarios:

  1. jajajaj... que bueno, por un momento pensaba que todo habia sido un sueño y te despestabas...

    ResponderEliminar
  2. Resulta que no era una lavadora. Es la bomba de una fuente-cascada que tienen por el otro lado, y cuando se queda sin agua, hace ese ruido. Me han invitado a otra sesión... jejeje.

    ResponderEliminar
  3. anda... muy bien, quien no llora no....

    ResponderEliminar