CALENDARIO DE ADVIENTO

Cuando veo por internet las maravillas que hace la gente para crear su calendario de adviento, se me cae la baba. Es que hay cosas realmente preciosas. Además hay tantas posibilidades que cuesta decantarse por uno.
Varios factores intervienen en la decisión:
-¿Qué materiales voy a utilizar?
-¿Lo hago gigante o pequeño?
-¿Qué voy a meter dentro?
-¿Cuántas manos van a crearlo? ¿Manos adultas o infantiles?
-¿Alguna temática? Ya sabemos que la temática es Navidad, pero hay que darle un toque personal.

Después de mirar y remirar, decidí agenciarme una caja de cartón grande que llegó a la farmacia. Y.....bueno, teniendo en cuenta que mi hija ha participado activamente, ha salido diferente de lo que yo tenía en mente, pero no se trata de venderlo en la tienda que no tengo, se trata de que hagamos algo juntas y de que ella disfrute dejando volar su creatividad.

Forré la caja con papel kraft, o papel de embalar que es más de andar por casa. Los hay de muchos colores. Después pegué tazas de plástico. Y mi hija se encargó de pegar los stickers, o las pegatinas con relieve y brillantitos, que también es más de andar por casa, por segunda vez.

Después, con cartulinas, recortamos las tapas. Ahí, libertad total. Las formas que te imagines, las que te parezcan horribles aunque tu hija esté entusiasmada con las que ha recortado, en fin, todo vale. Con rotuladores permanentes, dibujé los números y los detalles. También ella hizo bastantes. Y después de poner en las tazas las chocolatinas, chuches y demás guarrerías, el pegamento imedio es un clásico que funciona a la perfección.

Ahora espero que me aguanten las tazas por lo menos hasta el día 1....jejjejee. Mi hija ya está emocionada preguntándome que qué es lo que he metido dentro, está ansiosa, ji jij iii.

Inés........ no me critiques eh, que se hace lo que se puede....y mis manos no han sido las únicas....(es broma).

Pues nada, lo dicho, el año que viene, más.