viernes, 21 de agosto de 2009

EL SER HUMANO ES EXTRAÑO

A lo largo de mi vida, gracias a mi trabajo de cara al público, he podido ver gente de lo más variopinto. Pero no sólo en mi trabajo veo personajes interesantes.... desde que me muevo en transporte público.... jejeje,.... es muy divertido. Y es que el ser humano, es fascinante, hay un montón de "porqués". ¿Por qué un hombre apreta el botón de la puerta del metro si aún no se ha parado? ¿Quiere abrir la puerta en marcha y tirarse al vacío haciendo una pirueta cual Jackie Chan en plena persecución? Hasta que no se enciende la luz verde que rodea al botón, no se puede abrir la puerta, y él erre que erre, venga a apretar el botoncito.....
Esa señora mayor, de entre 75 y 85 años, no sabría decir. Entra en la farmacia donde trabajo apoyada en su bastón, dando pasos cortos, arrastrando los pies, en pleno patatús respiratorio, aparentemente ahogándose, sin poder articular palabra, intentando respirar, por fin después de un gran esfuerzo dice: ¡VENTOLÍN!. Se lo damos preparado para inhalar, lo coge, lo pone en su boca, y......empieza la maratón, 1,2,3,4,5,6,7,8,.....9.....,......¿10?....., ¿qué?....¿20?......¡hasta 25 inhalaciones de ventolín! Yo he visto un máximo de 5 inhalaciones cada cuatro horas, en casos de bronquitis y problemas respiratorios...... Casi de inmediato, pudo salirle su voz que nos dijo: Ahora ya puedo hablar. Y fue como si nada hubiera pasado. No era la primera vez que esa mujer se metía tal dosis de salbutamol en sus pulmones, estaba claro que estaba acostumbrada a hacerlo, pero..... ¿Cuánto hay de real en ese espisodio de ahogamiento? Al cabo de pocos días, volvió a suceder la misma escena, mi compañero se adelantó y le llevó corriendo el ventolín. De un golpe seco paró su agonía para decir: ¿Cómo lo sabes? y luego volvió a ahogarse. ¿Por qué ese paripé?
Una pareja de italianos vienen a comprar dos tubos de voltarén en crema. Al cabo de 5 minutos, entra en la farmacia todo el autobús que les acompañaba, como 25 italianos de edades comprendidas entre los 55 y 65 años. Uno tras otro iban pidiendo lo mismo, voltarén crema, uno per me, due per me, io tre per favore..... Y yo no paraba de reír, la escena era de lo más singular. Dudé si tendría suficientes voltarenes para todos los italianos. Y piensas: ¿Es que a todos les duele la espalda? ¿Todos necesitan un antiinflamatorio? ¿Por qué lo que hacen unos lo repiten todos los demás? Nuestra conclusión fue que aquí es mucho más barato que en Italia y decidirían llevárselo a casa.
¿Por qué hay gente que entra en los sitios y no dice "hola"? No sólo no dicen "hola", si no que te acercas a ellos y les dices que si les puedes ayudar, y ni te miran ni contestan, se dan media vuelta y salen por donde han entrado.
Ese hombre (joven) que viene buscando un remedio para evacuar, vamos para ir al lavabo... Lleva 6 días sin ir al wc. Le propongo un método rápido y eficaz, ya que lleva demasiados días estreñido. Un supositorio de glicerina le aliviará rápidamente. "Uy, no, no, no, es que esto.... no, esto no. No hay posibilidad". Esa fue su reacción al ver mi propuesta. ¿Perdona? ¡Ah!, que tu virilidad se ve dañada si te pones un supositorio....Claro, los hombres de verdad no dejan que NADA penetre por su orificio prohibido..... ¿Por qué un hombre joven no quiere ponerse un supositorio? De un hombre mayor, lo puedo tolerar, que no entender. Pero él......... patético.
Y así cada día, millones de "porqués" me invaden ante nuevas situaciones.
¿Seré yo la extraña?

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