jueves, 10 de junio de 2010

SER MADRE

¡Qué bonito es ser madre!............... No, en serio, ser madre te hace madurar. Y estableces un vínculo que nunca antes habías tenido con nadie. La relación madre-hijo es difícil de explicar con palabras. Alguien que no ha sido padre no puede entender el tipo de amor que le tienes a tu hijo..... Ni tampoco el "odio". Lo entrecomillo porque no es realmente odio pero, en algunos momentos llegas a sentir algo parecido.

Ser madre tiene fases bonitas. Fases en las que tu hijo sólo se siente seguro estando contigo. Te busca en todo momento, se alegra cuando le besas, tú eres lo más importante para él.....Y hay fases cansinas, en las que tienes que hacer uso de eso a lo que le llaman "educación". Educar no es divertido. Es más, es agotador y estresante.

Ahora me encuentro en una de esas fases cansinas. Imagino que se debe a su edad, a los cambios que experimentan cuando cumplen 5 años. Todo el tiempo está a la defensiva, cualquier cosa que le dices se la toma a mal, contesta a todas las frases que le digo, exige su turno a la hora de hablar, y............chilla. Todo el tiempo chilla. Y me crispa. No es capaz de decir una frase sin ponerle ese tonillo de lloriqueo, que no lo aguanto más. Y estoy crispada.

Encima creo que está enamorada......¿Puede una niña de 5 años sentir atracción por alguien? Tendré que preguntárselo a la pediatra. Si es que sí.............¡ sólo me faltaba eso ! Tendré que tener una charla, que todavía no toca. Eso es más adelante.....Pero ya me ha hecho un par de comentarios refiriéndose a un niño de un curso superior. Le importan cosas como cómo vestirse para que él la vea guapa....... Alucino. En serio, alucino.

He hecho un cuadro de normas, como en Supernanny. Sólo llevo una semana y los primeros días funcionó muy bien, ella se sentía motivada por enganchar el gomet en su recuadro. Pero ya estamos empezando a degenerar. Lo que peor lleva es hablar sin chillar, ni llorar. Es algo superior a ella. Y además la estoy castigando cada día, y en ocasiones, varias veces. No me gusta castigarla pero ¿qué hago?
La pared del pasillo sufre las consecuencias, tiene unas manchas así, a lo largo, lágrimas y mocos, mayoritariamente.
Le preguntas que por qué se porta así, y su respuesta es encogerse de hombros y decir: no sé...

Espero que en vacaciones la cosa mejore. O al menos la educación esté más repartida. Que podamos intervenir los dos padres. Mi marido ha estado estudiando un grado superior (que ha acabado recientemente la semana pasada) y su ausencia ha sido importante. No ha estado en todo el tiempo. Claro que el esfuerzo tiene su recompensa, y ....¡por fin tiene su títuloooo!!!!
Ya es técnico superior en fabricación de productos farmacéuticos y afines........
Ah! ah! Que me falta el aire. Por fin estará con nosotras por las tardes, o podrá llevarla al cole cuando vaya a trabajar de tarde, y así todo estará más repartido.

Necesitamos vacaciones, por eso. Él por su agobiante curso, y yo por mi comienzo de año, nada agradable. Así que a ver si encuentro algo que no se nos dispare (difícil) y programamos ya una salidita de una semana, a desconectar.

Mmmmm, ¡vacaciones!........

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