jueves, 12 de enero de 2012

FUE BONITO MIENTRAS DURÓ

Es curioso cómo pueden cambiar las cosas en un momento. Mi anterior entrada planteaba toda una serie de dudas sobre la lactancia en el mundo laboral, todas esas inquietudes que me acechaban y no sabía cómo iba a afrontarlas. Bien, pues ahora ya lo tengo resuelto. Y no porque se me haya ocurrido una fórmula mágica ni nada parecido......, a partir de hoy no doy de mamar. Increíble cómo se da la vuelta la situación, como esa tortilla voladora de los dibujos animados. A veces no hay explicación. Como dice mi cuñado: no intentes entenderlo, es así.

Hace unos 15 días mi pequeñaja empezó a rechazarme el pecho derecho. Sólo ése. Yo la había acostumbrado a un pecho por toma. No hacíamos los dos. Pero desde que empezó a guarrear, me vi obligada a darle los dos. Primero el "malo" y luego el bueno. Mi obsesión era que no dejase de mamar del derecho, para que no parase la producción. Así que me vi haciendo mil piruetas para darle ese pecho y que ella creyera que era el otro. Sólo me faltó hacer el pino. Pero estos dos últimos días, ha comido peor. Y con el pecho derecho.......fatal. Cada vez se enfadaba más. Tanto, que casi ni quería el izquierdo. Hasta que pasó. Ayer por la tarde me empezó a doler. Cada vez más. Y ella no quería ni acercarse. Así que cuando no pude más me tomé un ibuprofeno, y ya no le di más de mamar. Saqué mi leche congelada y empecé a preparar biberones. Me estuve poniendo calor, sacando leche con el aparatejo, y este mediodía ya me he empezado a tomar la medicación para cortar la producción.

Ayer me sentí impotente, me sentí mal. Si había ido tan bien....... La conclusión que he sacado de todo esto, es que, si mi cuerpo ha actuado así, no debo ir en su contra. Es más, no quiero más sacrificios por la teta. Ya fueron bastantes el primer mes. Ese maldito primer mes, en el que es todo pura esclavitud, aguantando dolor, y deseando que pase esa fase de aprendizaje tan difícil. Al principio lo haces porque el bebé es recién nacido, y la leche materna es lo mejor que puede tomar. Pero ahora........je je..........ahora tiene 3 meses. Me queda 1 para volver al trabajo. Así que pensándolo fríamente..........Es mejor así. Mejor para mi marido que, cuando se quede con ella por las mañanas, le dará biberón. Y mejor para mi, que me iré a trabajar sin sentir que mis tetas se llenan y no puedo vaciarlas. Si ahora me ha pasado esto, qué me hubiese pasado si en 7 horas esa leche no sale de ahí? Pues ya no voy a averiguarlo.

Me hubiese gustado disfrutar de la lactancia cuando ella hubiese sido más grandecita, ahora ya me cogía los dedos y me miraba sin parpadear mientras tragaba. Peeeeeeeeeero, la vida es así.
Se acabó.

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