jueves, 10 de septiembre de 2009

MATERNIDAD

Hace unos días que he vuelto a ser tía. Una niña muy bonita, 2,800 kg, 47 cm, pelito negro, muy bonita. Otro miembro en ésta, mi singular familia. La tuve en brazos un ratito y me recordaba mucho a mi hija, con el pelo oscuro y abundante, claro que el pelo de mi hija era espectacular. En el CAP la llamaban "la chica Pantene". La cuestión es que, viendo a mi hermana, recién parida, intentando que su bebé se enganche a su teta, controlando las horas.......afloran en mi recuerdos de mi post-parto....
La maternidad es algo difícil de explicar...... Cuando estás embarazada, estás deseando ver a tu bebé, tocarle, besarle, olerle, etc, etc. Y piensas que cuando nazca te invadirá un aura de bienestar y confort que no te puede dar otra situación más que esa...... Algo realmente único y especial..... NO ES ASÍ. Por lo menos yo no lo recuerdo así. Lo que te invade es un montón de preocupaciones, dudas y miedos. Estás feliz de que hayas parido, estás feliz de tener a tu hijo en brazos ya por fin, pero te das cuenta de que esa persona de 47 cm, es un perfecto desconocido. Ese vínculo que dicen algunos libros, esa conexión, sinceramente, la única conexión que realmente existe es la del cordón umbilical.... La sensación que tienes en el embarazo, cuando se mueve, cuando te da pataditas, es totalmente diferente a tenerle delante tuyo descansando en su cunita. Toda la felicidad hipotética se transforma en miedo real. Miedo a que le pase algo, miedo a no saber por qué llora, miedo a que no engorde, miedo a la muerte súbita, miedo, miedo, miedo....... Afortunadamente esta sensación no dura siempre, sólo faltaría.... A medida que le vas conociendo, te vas tranquilizando.... Sus ruidos, sus caras, sus cacas..... jajjajjaja. Sí, entras en un mundo en el que nunca habías estado antes. Cacas, pipis, vómitos, rojeces genitales, todo un registro de llantos, etc, etc. A esto hay que añadirle que la madre, no acaba de venir de vacaciones precisamente... Un parto es algo que hoy en día no preocupa a nadie, es algo fácil. Pero si analizamos el proceso por el que pasa nuestro cuerpo en cuestión de horas.... Es algo MUY FUERTE.
Llegamos a casa con una barriga flácida, hinchada y vacía, con pérdidas de sangre contínuas, con los pechos altamente inflamados y llenos de leche que tu hijo no sabe sacar, con dolores en toda tu parte genital, huesos inclusive, falta de sueño espectacular, y si encima tienes anemia.......... Un panorama genial. ESO ES LA MATERNIDAD.
Eso es la parte mala, claro, los primeros 15 días son muy "heavys". Luego todo va relajándose y vuelves a ser tú. Una tú modificada, poca gente vuelve a su estado original. Pero anímicamente ya te sientes bien y empiezas a disfrutar de tu hijo.
La verdad es que las parejas pasan por una dura prueba, en esos momentos se ve realmente si tu pareja y tú estais en la misma onda. El padre debe ser supercomprensivo. En realidad, es como si abducieran a su mujer, hay que tener en cuenta que su pareja prácticamente desaparece las primeras semanas. Entran en casa después de su jornada laboral y ven a alguien, (que se parece a la que era su mujer), en el sofá de casa con el bebé a un lado, limpiándose una teta, en camisón, sin peinar, con la peor de sus caras deseando que alguien la libere ..... también debe ser duro. Ellos no tienen la culpa de no poder embarazarse así que no hay que hacerles sentir culpables por nuestro dolor, malestar, cansancio, etc. Y a veces..... podemos hacerlo sin darnos cuenta. Son muchas cosas difíciles en poco tiempo.
A pesar de todo esto, la maternidad es algo increíble. Aunque casi siempre nos limitamos a explicar las cosas malas, también existen buenas. Y si fuera tan malo.... nadie tendría hijos... ¿no?

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